Corredores de propiedades del Gran Concepción proyectan un aumento en los arriendos de segundas viviendas producto de la covid-19, así como también el rediseño de este tipo de viviendas.

Así lo afirma, por ejemplo, la corredora de propiedades Cármen Luz Morán, quien cuenta con más de 25 años en el rubro, vinculados a las zonas de Pingueral, Dichato y Coliumo.

“En el caso de las casas de veraneo deberán modificarse con la instalación de estufas para calefaccionarse porque creo que la tendencia se dirigirá hacia este tipo de casas”, advierte la corredora.

En cuanto a los valores, en el caso de PigueralMorán dice que “estuve arrendando hasta julio a $400 mil una casa de 4 dormitorios, la gente también está comprando sitios en este lugar y es poco probable que los valores vayan a bajar y en Coliumo y Dichato también están apareciendo interesados para vivir  ahí, incluso, personas que están cotizando desde el norte, por lo que le veo buen futuro a esto”.

Por su parte, Hilda Morales, sostiene que “actualmente y por las restricciones algunos arriendos han bajado de precio y los terrenos no tanto”, sin embargo agrega que “hay cada vez más interesados en salir de la ciudad por periodos más largos para alejarse de la pandemia y los contagios”.

Una mirada diferente es la de Gabriel Donetch, al expresar que “ha habido interés en propiedades no urbanas, pero no creo que sea algo que podamos relacionar de manera directa con la intención de hacer un abandono masivo de las ciudades, si no más bien en que son propiedades de menos valor, que se ajustan de mejor manera a la capacidad de pago actual de las personas”.

En relación a posibles variaciones de precios entre marzo y abril de este año, respecto del anterior, señala que “en los arriendos debería existir una variación importante ya que, en general son de naturaleza inmediata y sus montos mucho menores, por lo que sus precios se ven más afectados por las circunstancias”.

Una buena inversión

Morán prevé además que este tipo de casas “va a ser una opción para quienes aún tengan acceso a créditos o tengan dineros guardados en depósitos, ya que una propiedad será más segura porque no sabemos qué pueda pasar con los bancos más adelante y ante esto, qué mejor que tener un bien raíz”.

También, aclara que “dadas las restricciones actuales han sido los propietarios de Pingueral y Dichato quienes han desistido de arrendar sus propiedades o segundas viviendas por periodos cortos, debido a que no quieren contaminar sus casas”.

Alza de la demanda

En relación al comportamiento de la demanda por este tipo de casas, Morán también explica: “he visto que ha subido la demanda de personas que busca trabajar lejos de la ciudad, máximo a 40 km. o 50 km. en un ambiente más natural”.

A la vez, comenta que “la idea es pedir un cambio de residencia o fijar residencia en Pingueral, pero no arriendos de fin de semana”.

En tanto, Morales, concuerda con su colega al plantear  que “naturalmente, cada vez va haber una mayor demanda porque yo le digo que en los primeros 30 días de cuarentenas y restricciones, nadie buscaba nada, pero ya pasando los 30 días, se vinieron como de golpe las solicitudes de personas que querían arrancar de la ciudad, lo que creo irá en aumento por el encierro”.

En cuanto a los sectores con proyección de mayores demandas, indica que “es notorio el interés en zonas como Quillón y Patagual que está bien cotizado porque no está lejos de Concepción y se respira aire puro todavía”.

Cambios en los diseños

Otro de las modificaciones que  se proyectan es que “hasta el diseño de las casas va a cambiar producto de la covid, ya que se diseñarían con un baño en los ingresos para que las personas puedan cambiarse de ropa y lavarse las manos antes de saludar a la familia, donde los arquitectos están anticipando cómo serán las nuevas viviendas después de esta pandemia que no sabemos cuánto va a durar”, sostiene Morán.

La corredora incluso va más allá al decir que “los planos reguladores deberán ser repensados por los municipios y considerar espacios comunes más amplios con grandes centros de esparcimiento para que la gente vaya resguardando las distancias suficientes”.